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IDS 2017 – La tormenta perfecta y la ventana hacia un nuevo modelo corporativo

Otro International Dental Show, otros cinco días en Colonia rodeados de miles y miles de productos mezclados entre tecnología y algún que otro implante. Tomo distancia y analizo el IDS desde la perspectiva del consumidor que se dirige al pabellón 3.1, uno de los seis pabellones del complejo ferial Koelnmesse. ¿Cómo llego hasta allí?, me pregunto para empezar. Soy curioso, tengo preguntas y quiero respuestas, por lo que una vez situado en el recinto, me surgen muchas otras dudas: ¿Cuáles son las tendencias de esta edición? ¿Qué marcas de implantes me ofrecen más versatilidad? Es más, ¿qué marcas de las que exponen fabrican implantes? Y en cuanto al CAD-CAM también necesito aclaraciones: ¿Quién me ofrece una opción de fresado u otra? ¿Cuáles son los mejores materiales para llevar a cabo este proceso o aquél otro? Y así hasta terminar alcanzando tal punto que uno se plantea su propia existencia. ¿Quién soy y qué he venido a buscar en IDS?

Confusión o desorientación son dos estados que pueden ayudar a describir la sensación que uno ha podido experimentar al aterrizar a la edición de 2017 si no conoce el sector al detalle. Las razones de ello son varias. Un doctor cuyo fin es explorar entre las novedades en implantes, por ejemplo, no debe buscar ya marcas cuyo elemento central de comunicación sean los implantes mismos. Tiene que indagar entre las distintas tecnologías, buscar el producto escondido en un lugar privilegiado entre complementos que lo hacen mejor, más completo, más vendible o con un mayor valor añadido. Más tarde, encontrará los implantes entre aditamentos o entre conexiones distintas, y los encontrará con diferentes opciones: digitales o inteligentes, con o sin tratamiento, etc.

La evolución del sector odontológico es enorme y al visitante del IDS, en consecuencia, le cuesta cada vez más digerir esta sobre-información. Quiere entender. Entender, por ejemplo, qué posibilidades le ofrecen los periféricos de la marca que fabrica un determinado implante, si existen estudios, si tiene aval científico, etc. Entender, también, cómo funcionan los centros de fresado y sus posibilidades. Investigar sobre nuevos materiales. Conocer qué fresadoras e impresoras 3D pueden resultar, o no, interesantes para su negocio. Y por supuesto, el doctor o cliente también se interesa por las posibilidades de diseño: qué softwares de diseño dental hay disponibles, qué escáneres de laboratorio y de clínica existen, cómo planificar un caso digitalmente, y más.

STOP. Reconstruyamos el escenario. Nos encontramos en un mercado maduro en el que todo ha cambiado y en el que las posibilidades se cuentan por millares. La tecnología nos devora y ello exige un cambio de enfoque desde el punto de vista corporativo. En AVINENT, hemos transformado esta sobre-información en una oportunidad, moldeándola y haciéndola mucho más digerible para el cliente. El flujo digital ya está aquí, es evidente. Ya lo adaptamos a nuestro sistema de trabajo y lo usamos como método de comunicación de nuestra oferta de servicios y productos. Sin ser presuntuosos, podemos sentirnos orgullosos de poseer una gran capacidad tecnológica y una gran polivalencia para adaptarnos a los cambios de nuestro entorno. Quien conoce nuestra historia sabe de nuestros atributos y evolución. Recientemente hemos lanzado nuevas líneas de negocio basadas, precisamente, en este cambio de paradigma: diseño con softwares avanzados, comunicación virtual con el cliente, impresión 3D de titanio y personalización 100% en cada uno de nuestros productos y servicios.

Este es nuestro concepto de odontología moderna para entender la evolución del sector y todas sus nuevas posibilidades basadas en el cambio de paradigma que significa la llamada Fabricación 4.0. Un concepto muy nuevo que subraya el cambio en el producto y en el proceso de fabricación y que nos sirve para ordenar y mostrar de una forma nítida todo lo que podemos ofrecer como marca. Un modelo que nos ayuda a conocer hasta dónde quiere llegar el consumidor y que, por supuesto, nos sirve para enlazar y conectar todas las soluciones que tenemos a nuestro alcance de una forma muy clara. Esta revolución es la que hemos asimilado como empresa y es la que nos ayuda a construir la historia del cambio. ¿Te apuntas a la odontología 4.0?